Hace 16 años parecía raro
esto de la semana grande, resultaba
extraña una fiesta veraniega cuyo nombre no es el de un santo o santa, pero pasado el
tiempo, debemos reconocer que el proyecto ha tenido éxito.
En esta semana festiva y cultural se obra el milagro cada año, el pueblo soriano vacío y aburrido se transforma de repente en activo y concurrido. La población se multiplica, las casas están ocupadas, hay niños por todas partes y el bar despliega una terraza propia de una ciudad.
Las asociaciones del pueblo y el Ayuntamiento han hecho un buen trabajo durante estos años, cada edición de la semana grande ha requerido que muchas personas voluntariosas hayan planificado, trabajado y velado para que cada actividad llegase a buen fin. Este artículo es en su homenaje.
Durante estos años se celebraron
actividades culturales muy vinculadas a la filosofía de nuestra asociación
entre las que destacan las exposiciones de aperos agrícolas, la de la casa
rural en los años 50, las escuelas del Pueblo, grupos escolares, el encuentro
de asociaciones, entre otras.
Este año hemos disfrutado de nuevo de juegos, charanga, discomóvil, concierto en la iglesia, senderismo, comida popular, migas, barbacoa y mucho más.
Ruta teatralizada a cargo de una excelente actriz. Se inició en La Canal como muestra la imagen y transcurrió por las calles del pueblo rememorando historias y costumbres de nuestro pueblo.
Concierto de Almazán Sax Trío en la Iglesia.
Una vez más la Iglesia del pueblo abrió sus puertas a la mejor música, la de siempre. El escenatio es insuperable, un autentico lujo por su belleza y por la excelente acústica.